Hay libreros que son de otro planeta. Cuesta creerlo casi tanto como que el hombre pisó la Luna, pero es cierto; aún podemos encontrar auténticos recomendadores de libros de carne y hueso que miman como pocos las naves literarias que albergan sus estanterías.
Pilar Márquez y José María Soret son dos de esos marcianos hechos de letras que nada tienen que ver con los vendedores de libros tan deshumanizados que encontramos en las grandes superficies. Hace algo más de un año decidieron explorar nuevos universos y fundaron Hombrecillos Verdes, una librería de segunda mano especializada en ciencia-ficción, fantasía, terror y misterio, en la que también hay espacio para el cómic. A ellos se suma un tercer socio, Francisco Tirado, encargado de la parte gráfica de este fantástico proyecto que en verano se amplió con la creación de la editorial El Transbordador. Aunque, sobre todo, venden por Internet, la librería se puede visitar previa cita en C/Ingeniero de la Torre Acosta, número 1, en Málaga. Toda la tripulación da buena cuenta de lo que les llega procedente de otros mundos a través de Facebook. Hombrecillos Verdes, terrícolas, está dispuesto a conquistarnos.
¿Cuándo surgió el proyecto y por qué?
Hombrecillos Verdes surgió hace un año y medio. En primer
lugar, lo hizo por una opción de autoempleo de Pilar, después de muchos trabajos
precarios con contratos muy breves. Hablando los dos descubrimos que uno de
nuestros sueños en la vida era tener una librería.
Nos parecía que estos eran géneros que merecían algo exclusivo. Estuvimos viendo que de segunda mano online no había ninguna que estuviera especializada en ellos; eso fue lo que nos decidió. Fue una decisión tanto por gusto nuestro como por el hueco de mercado que veíamos. Los bares funcionan muy
bien, pero una librería es más complicado.
¿Qué dificultades habéis encontrado en vuestro camino como libreros?
¿Qué dificultades habéis encontrado en vuestro camino como libreros?
Bueno, tuvimos mucha suerte de recibir el apoyo de la gente desde el principio. Play Planet, con los que llegamos a un acuerdo, nos cedieron un
espacio para empezar, algo impagable y a quienes estaremos agradecidos
eternamente.
Ahora
que nos hemos independizado, que hemos alquilado un local nosotros ya por
nuestra cuenta y riesgo, que nos hemos enfrentado a la burocracia local, que es
tremenda, es cuando hemos visto dificultades. Ha sido muy complicado, después
de estar un año haciendo esto, una sensación rara, como si no hubiéramos hecho nada, como partir de cero.
Actualmente puede estar alrededor de unos dos
mil libros. Es un fondo pequeño, somos conscientes de nuestro tamaño,
pero sí que es verdad que es muy concreto y muy escogido. Como mucho tendremos unos veinte libros repetidos. Son títulos prácticamente únicos. Somos muy pequeños, pero cuidamos muchísimo los
libros que traemos.
¿Cómo adquirís los ejemplares?
Sobre todo encontramos mucha gente con problemas de espacio
en casa y con parejas que les dicen «O los libros o yo». El común denominador
son personas que, por supuesto, valoran los libros que están vendiendo y que, aparte
de ganar un dinero, lo que quieren es que tengan una segunda vida. Eso a
nosotros nos gusta mucho. También compramos en ferias de saldo o mercadillos.
¿Qué criterios tenéis a la hora de comprar una obra para vuestras estanterías?
Intentamos que sean libros interesantes, dentro de los
géneros que trabajamos. No huimos de los best sellers. Por ejemplo, tenemos un
Codigo Da Vinci a dos euros. Son títulos que nos llaman la atención y que,
aparte de que se pueden vender bien, merecen la pena. Cuidamos mucho el estado de los libros que adquirimos, procuramos que tengan unas condiciones óptimas. Con el tiempo uno sabe que hay ediciones que han envejecido peor que otras. En cualquier caso, siempre le decimos al cliente cuál es el estado del libro.
Son libros que ya han pasado por otras manos, libros con historias. ¿Qué es lo más curioso que habéis encontrado entre las páginas?
Son libros que ya han pasado por otras manos, libros con historias. ¿Qué es lo más curioso que habéis encontrado entre las páginas?
Pues estampitas de Comunión y fotos de
novios y novias, hojas de flores secas... Libros con dedicatorias y poemas. Nuestro favorito, que pusimos con un imán en la nevera de casa, fue un recorte de la revista Super Pop en la que venía la
dirección de Los Ángeles para escribirle cartas a Bruce Willis: ¡un Bruce Willis con pelo!
¿Cuál es la joya de vuestro catálogo?
La joya fue la primera y única edición cubana de El Hobbit. Duró seis minutos en la web. Se vendió hace unas semanas, un visto y no visto. Pero no nos hagas escoger entre nuestros «niños», nos costaría mucho elegir uno de ellos. Pero, por ejemplo, tenemos dos ejemplares de El Cuento de la Criada, de Margaret Atwood, un libro difícil de encontrar y, en cierta forma, bastante desconocido.
Hombrecillos Verdes apuesta firmemente por editoriales menos conocidas y por autores autopublicados. ¿Merece la pena asumir ese riesgo?
Nosotros tenemos autores que se han autoeditado libros. Asumimos ese riesgo y reconocemos el valor de estos escritores y valoramos su esfuerzo, un esfuerzo no solo de tiempo, también económico. Aceptamos las propuestas de calidad, las obras que nos parecen más chulas. De hecho, uno de los libros que más recomendamos es uno de nuestros autopublicados: Fractal, de Damián Cordones, que, por cierto, se vende muy bien.
Está claro que os gusta arriesgaros, lanzaros a la aventura. Ahora seguís con vuestra conquista espacial con Ediciones El Transbordador. Habéis decidido, además, tomar el camino clásico y publicar en papel. ¿Cómo va el alunizaje del nuevo proyecto?
Tenemos abierta la
recepción de manuscritos de ciencia ficción, fantasía y terror. Hemos
encontrado una acogida buenísima. Nos sorprendió mucho la cantidad de gente con
esa inquietud por escribir y mover su obra. Ahora nos espera el trabajo
agotador, pero muy agradable de leer todo lo que nos ha llegado para ver qué
encaja en nuestra línea editorial.
En este sentido, ¿qué consejos le dáis a los autores noveles para enviar sus obras? ¿Qué es lo que creéis que se debe y no se debe hacer a la hora de mandar una novela a una editorial?
Desde nuestra humildad, porque acabamos de empezar, hay unas
reglas básicas. En nuestro caso, son tres: envío en PDF de la obra, una breve sinopsis y
una descripción del autor en quince líneas. Son normas que no son un capricho. Ajustarse a este formato abre
la puerta. Hay que cuidar el cuerpo de los correos electrónicos porque cuando uno entra por la puerta da los buenos días. Es una forma
de distinguirse. Hay personas que nos han mandado unos correos maravillosos: no solo han detallado la sinopsis, también los conceptos que quieren transmitir, han incluído un guión de los
personajes… Es fundamental llamar la atención, despertar la curiosidad.
El primer libro que vais a publicar, que verá la luz en otoño, está firmado por Miguel
Córdoba. ¿Podéis adelantar algo de esta novela, Ciudad de Heridas?
Podemos adelantar muy poco. Deciros que Miguel Córdoba fue el primer cliente online de Hombrecillos Verdes. Supimos
de su obra, nos hicimos con ella y nos gustó tanto que le propusimos editarlo.
Es un libro bastante inclasificable, está muy bien escrito, con mucho trabajo
detrás; engancha.
Por último, ¿qué libro recomendáis de cada género para alguien que no sepa muy bien por dónde empezar?
En terror, recomendamos El Hombre Lobo Insólito, una antología de autores de ciencia-ficción que escriben sobre el mito del Hombre Lobo con motivo del aniversario de la película. En fantasía, la trilogía Tribu de Uno, unos libros que no son fáciles de localizar y que se salen de lo típico. En ciencia-ficción, La ciudad y la ciudad, de China Miéville, que nos marcó
personalmente mucho. Y del género de misterio nos quedamos con los clásicos, con cualquiera de Agatha Christie, entre ellos, Asesinato en el Orient Express.
Entre las recomendaciones de Hombrecillos Verdes, destaca también Fundación, de Isaac Asimov |
Genial, Marina. Y sí que se ve una librería distinta. Coincido contigo en que es muy difícil encontrar en las grandes superficies o franquicias libreros especializados y que amen lo que hacen, que realmente sepan lo que tienen, vamos.
ResponderEliminarbsos!
Sin duda una entrevista estupenda Marina. No los conocía, pero me ha encantado su historia y desde ahora los seguiré...besos
ResponderEliminarMe ha encantado la entrevista, buenas preguntas y buenísimas respuestas. Me he reído mucho con lo del recorte de la Super Pop, revista que compraba hace siglos con la edad del pavo y recuerdo eso de que a veces venían direcciones de famosos para que le escribiéramos cartas, a un jovencísimo Leo DiCaprio, etc. Lo de la edición cubana de El hobbit, super curioso y no me extraña nada que la vendieran al instante y jummm me pregunto a qué precio.
ResponderEliminarMe pasaré por la página de ellos de vez en cuando, que no los conocía y seguro que hay cositas interesantes que comprar.
Besos. Y gracias Marina por esta entrada.